Convocatoria a referéndum obliga a redefinir estrategias sobre TLC
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Corrales recordó la máxima jurídica de "primero en tiempo, primero en derecho", que asegura el gobierno intenta escamotearle. |
Por su parte, en los grupos opositores se expresaron las más variadas reacciones: desde un José Miguel Corrales -gestor de la idea y la petición ante el TSE--, quien advirtió sobre el peligro de maniobras "fraudulentas" de parte del gobierno de Arias, hasta un Ottón Solís, ex candidato presidencial del Partido Acción Ciudadana (PAC, principal de oposición) que auguró una "abrumadora" victoria, pasando por los dirigentes de organizaciones sociales y sindicales que señalaron que obligatoriamente tendrá que haber equidad en la campaña de propaganda del referéndum.
El rector del Instituto Tecnológico de Costa Rica (ITCR), Eugenio Trejos, principal dirigente del Frente Nacional de Apoyo a la Lucha contra el TLC, pidió a la Asamblea Legislativa y al gobierno que retire de la discusión legislativa tanto el tratado como la denominada agenda de implementación, en la que se encuentran los proyectos de apertura del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) y del Instituto Nacional de Seguros (INS) entre más de una decena de iniciativas de ley.
Lo cierto es que ahora los partidos de oposición tendrán que volver a sus estrategias de campaña y lanzarse a las calles a convencer a la ciudadanía para que rechace el TLC, y junto a los sectores sociales, ir a las provincias costeras, las más pobres, que fueron las que le permitieron en las elecciones nacionales de febrero del 2006 al PLN ganar la presidencia, aunque dejando los pelos en el alambre.
Mientras, el presidente de la Unión de Cámaras, Rafael Carrillo, anunció a la prensa que la empresa privada pondrá los votos a favor del TLC de 1,6 millones de asalariados del sector (casi la mitad del padrón). "Hay 1.600.000 trabajadores privados que lo apoyan (el TLC) y son conscientes de la necesidad de que el país salga adelante", dijo el empresario la tarde del jueves 13.
La Conferencia Episcopal de la iglesia Católica también expresó su complacencia por la decisión del TSE de convocar a la consulta popular y pidió a los medios de comunicación que aseguren "un pluralismo real en este delicado tema, garantizando y facilitando condiciones de igualdad para las tendencias de opinión".
¿Plan B, mera coincidencia, o: ambas?
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El gobierno dejó atrás su discurso de que era la Asamblea Legislativa la que tenía que definir el TLC, debido al fracaso de su estrategia que resultaría más larga. |
El jefe libertario Otto Guevara le había indicado incluso al presidente Oscar Arias que utilizar el denominado mecanismo de "vía rápida", el que durante meses insistió la fracción del PLN, era un error que pondría en riesgo la ratificación del TLC antes de marzo del 2008, fecha tope para que Costa Rica no quede fuera del acuerdo firmado entre Estados Unidos y Centroamérica durante el 2004.
Un sector de los libertarios también se mostró preocupado por la abierta vinculación de su jefa de fracción Evita Arguedas en eventuales negocios relacionados con la apertura de las telecomunicaciones en el marco del TLC, lo que obligó a la propia diputada a marginarse de la discusión de un estratégico proyecto de ley en una comisión legislativa y de votar dicha ley si llega al plenario.
Asimismo, miembros de la fracción legislativa del PUSC le habrían hecho saber al gobierno que entre más cerca de la campaña política del 2010 estuviera el TLC, más condiciones pondrían ellos para su ratificación, debido al costo político de cargar con ese proyecto. De ahí que el mismo Rafael Angel Calderón dijera en el mes de marzo, que conforme él "estudiaba más a fondo" el TLC más dudas le asaltaban sobre "aspectos de constitucionalidad".
Ante las crecientes dificultades afrontadas por el TLC en el Congreso, debido a propios errores del oficialismo y a la cada vez más beligerante oposición del PAC, jalonado a ratos por los diputados José Merino y Oscar López, la decisión anunciada por el TSE el jueves 13 de abril, pareció caer como anillo al dedo al gobierno de los hermanos Arias.
Arias ahora es 'fan' del referéndum
El presidente Arias y su hermano Rodrigo rechazaron hasta el jueves pasado cualquier posibilidad de apoyar un referéndum, pues alegaban que el tema ya estaba suficientemente discutido y además señalaban que la democracia costarricense es básicamente "representativa", y que por tanto la decisión sobre el futuro del tratado cabía única y exclusivamente a los diputados, donde ya contaban con su bloque de 38 votos (mayoría calificada) con sus 25 diputados, más los cinco del PUSC, seis de los libertarios, y sus hasta ahora incondicionales Guyon Massey y José Manuel Echandi.
No obstante, un día después que el TSE anunció que autorizaría a Corrales a recoger el 5% de las firmas necesarias para autorizar un "referéndum ciudadano" en un plazo de nueve meses -como lo señala la ley--, el gobierno se apropió de la iniciativa del ex diputado de Paraíso de Cartago.
"El referendo es una linda oportunidad para pasar la página del TLC. Es una bendición de Dios (no le dio ningún crédito a Corrales) que el TSE haya abierto este camino", dijo Arias, tras anunciar el día viernes que en vez del referéndum ciudadano, el gobierno enviaría una solicitud para ser aprobada por la Asamblea Legislativa por solo 29 votos, lo que evitaría la recolección de las firmas.
Arias incluso le puso "fecha cierta" al referéndum. A su juicio se celebrará en agosto, o a más tardar en setiembre.
Opositores piden retirar TLC de discusión parlamentaria
Los líderes de los variados grupos opositores coincidieron en que el gobierno debe retirar del Congreso la discusión del TLC, así como los proyecto de la denominada Agenda de Implementación, hasta tanto no se haya realizado el referéndum.
Ottón Solís dijo que para la realización del referéndum hay tres temas pendientes: uno es el de cómo garantizar la equidad para acceder a los medios de comunicación durante la campaña, dos: que la Sala Constitucional defina si en el tratado existen o no inconstitucionalidades, y en tercer lugar el retiro de la discusión de la agenda de implementación.
El secretario general de la Asociación Nacional de Empleados Públicos (ANEP), Albino Vargas, calificó la posición de Arias de "oportunista". "Es una posición demagógica porque los grupos económicos que el representa aceptan el referéndum a regañadientes y el discurso democrático es hueco y de la boca para afuera", dijo Vargas.
Por su parte, Corrales, quien desde el 2006 ha sido claro en que solo el referéndum podría evitar una confrontación social de incalculables consecuencias en Costa Rica, dijo estar defraudado por la actitud asumida por Arias.
Corrales dijo que el Ejecutivo con una convocatoria directa a referéndum, estaría desvirtuando el carácter de la consulta, pues no habría necesidad de recoger más de 130.000 firmas como lo establece el referéndum ciudadano.
"Al evitarse este proceso, Arias se aseguraría que el pueblo continúe desinformado. Es lamentable que esté tratando de desvirtuar así el instrumento del referéndum, eso es un intento de fraude", afirmó Corrales.
Con el referéndum ciudadano, los que convocan tendría hasta nueve meses para recorrer el país en busca de firmas y labor de convencimiento. Con la ruta Arias eso no es necesario.
NOTA TOMADA DE INFORMA-TICO. COM ( http://www.informa-tico.com/php/expat.php?id=16-04-07012210&esPrimerArticulo=1&ed=144&fecha=16-04-07&foro=)
5 comentarios
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¿Por qué no se explica en la nota tan nefasta complicidad?